Sólo necesitamos los dos pintuñas que más te gusten y esto:
Una esponja de maquillaje
Unas pinzas.
Es necesario partir en trozos más pequeños la esponja; los "desgarramos" para que nos queden con este textura:
1er paso: nos pintamos las uñas del color que más nos guste. Yo prefiero que la base sea más clara que el color que pondremos encima. En este caso he elegido este color: "210 Glamorous Red" de ASTOR.
2º paso: en un papelito, ponemos una gota de un pintauñas del mismo color pero más oscuro. En mi caso, un color granate: el nº 785 de DEBORAH.
3er paso: con las pinzas, cogemos el trocito de esponja y lo mojamos en la gota de esmalte que pusimos en el papel; sólo mojamos una esquinita, para tener más precisión a la hora de manejarla.
4º paso: damos pequeños toquecitos con la esponja mojada desde la punta de la uña hacia la mitad; no sobrepasar más de los tres cuartos de la uña.
Aquí os dejo el vídeo para que veáis todo el proceso.
Y como resulta que se acaba volviendo negro????
ResponderEliminarNo es negro, es que la cámara no lo ha captado bien. Es un rojo muy muy oscuro, tipo burdeos. Así que en comparación con el rojo sangre queda así de oscuro, pero no negro.
ResponderEliminarMe encantó tu blog, yo tambien soy una fan de los esmaltes y los diseños. Espero comprarme las esponjitas pronto, ya que de floja no lo he hecho nada más.
ResponderEliminar