Cómo pintarse las uñas (manicura limpia) trucos

Hola chicos, ¿cómo os va todo?
Como podréis comprobar, yo estoy algo liada... Pero no me voy a quejar más que tenéis que estar cansados de oírme ya ("la tía pesada esta que no hace más que quejarse y nunca publica en el blog").

Hace un par de semana hice un vídeo que tenía pendiente desde hace mucho tiempo, y como bien habéis leído en el título de la entrada, se trata de trucos para pintarnos las uñas de una forma limpia y pulcra. Que te sales siempre que te pintas, pues no hay problema porque hay mucho trucos de cómo hacer para terminar con la manicura perfecta.

Todos los trucos que doy y uso son mil veces más efectivos si los ponemos en práctica nada más aplicar el esmalte, es decir, cuando está mojado. En seco luego todo se hace cuesta arriba.

Empecemos con cómo (más o menos, un poco exagerado) se quedan las uñas después de pintárnoslas cuando nos salimos:

1er truco > usamos palitos de naranjo
Cuando nos salimos, inmediatamente con un palito de naranjo retiramos el esmalte por donde nos hemos salido. Yo suelo usar la punta plana para esto y dejo la punta más afilada para aplicar piedrecitas y todas esas cosa que me gustan pegarme en las uñas ;-)

2o truco > bastoncillos de algodón con quitaesmalte.
Al igual que el primer truco, si se hace inmediatamente después de haber metido la pata con el esmalte, sale sin problemas. Sé que hay unos bastoncillos que tienen la punta más en punta en vez de redondeada. Esos limpiarían más detalles.





3er truco > lápiz corrector.

El lápiz corrector es, la verdad, muy útil. Es un rotulador con la punta de fieltro empapada en quitaesmalte. Este en particular es de la marca KIKO, pero los venden por todas partes. Cuando la punta está muy sucia o medio rota, vienen recambios en la parte de arriba para que puedas poner una punta nueva. Recomiendo usar este truco cuando el esmalte no se ha terminado de secar. Es mucho más sencillo así.

4º truco > acetona pura + glicerina + pincel biselado.
Este truco lo aprendí hace mucho tiempo en un blog. Consiste en mezclar un poco de acetona pura (se compra online) con dos gotas de glicerina para que la acetona no reseque tanto la piel. Luego, con un pincelito biselado, se limpia cualquier resto de esmalte. Este truco da lo mismo que lo hagas en seco que en mojado porque funciona a la perfección.
ADVERTENCIA: la acetona pura es un disolvente muy potente y hay que tener mucho cuidado con él. Si sois menores de edad, os recomiendo usar quitaesmalte normal y corriente, pero hacezlo con el esmalte mojado.
Siempre pondo la acetona junto con las dos gotas de glicerina en un bote mucho más pequeño y manejable. Porque si metes el pincel manchado de esmalte, al final se manchará toda la acetona que hay en el bote grande y es una pena.

Y este sería el antes y el después.

Os dejo el vídeo que tenéis la práctica de cómo se usa cada método y de cómo queda el resultado.
Espero que os haya gustado y mil gracias por estar siempre aquí.
Muac